Le Figaro.-
Víctima de un terrible accidente, de donde emergió milagrosamente de un incendio en el que permaneció 28 segundos antes de poder retirarse, Romain Grosjean salió del hospital militar de Bahréin el miércoles por la mañana. El piloto del equipo Haas, que no participará en la próxima y última carrera de la temporada en el mismo circuito este fin de semana, dio una noticia tranquilizadora sobre su salud. “Físicamente, estoy bien. Mi mano izquierda está muy dañada, mi mano derecha está bastante bien, un esguince de tobillo izquierdo y mi rodilla izquierda está hinchada, pero eso no es una gran preocupación. El dolor es muy soportable, estoy tomando paracetamol ”, dijo el francés.
El ginebrino de 34 años también quiso agradecer a uno de los rescatadores a quien en parte le debe la vida. Un primer bombero intentó intervenir en las llamas, sin mucho éxito. Un segundo cruzó la pista antes de activar metódica y más eficazmente un extintor más potente. Al ex piloto de Renault le gustaría encontrarlo para agradecerle personalmente y mostrarle toda su gratitud.
«Quien cruzó la pista y roció mi cabina es un bombero militar profesional. Sabía exactamente lo que estaba haciendo. Roció el lugar donde estaba en el auto para mantener una especie de pasillo de aire. Todos me dicen: ‘¡Debes haber estado súper caliente! Pero nunca tragué aire caliente. Este caballero me salvó. Intentaré encontrarlo para darle un mini casco y agradecerle desde el fondo de mi corazón ”.
El encuentro promete ser emocionante.
