
A 255 días para el inicio de los Juegos Olímpicos, el gobierno japonés estudia aliviar las restricciones de entrada al país para facilitar a los deportistas de todo el mundo la preparación para el evento. En la actualidad, más de 150 naciones siguen en la lista de prohibición de entrada a Japón como una medida del protocolo antiCOVID-19.
El gobierno estudia conceder un permiso especial a los deportistas de estos países, siempre que presenten pruebas de un resultado negativo de la prueba de coronavirus y tomen medidas de precaución mientras se encuentran en Japón.
En su intento por reactivar la movilidad, el Aeropuerto de Narita en Tokio ya cuenta con un laboratorio de pruebas PCR. Los pasajeros pueden someterse a los test de coronavirus en el aeropuerto y obtener los resultados en 6 horas, aunque el objetivo es reducir esta espera a solo 2 horas a finales de mes, según Reuters.
Así, los deportistas deberían someterse a una prueba de COVID-19 antes de salir y al arribar a Japón. También se espera que su movimiento esté restringido a las sedes de competición y entrenamiento. Para ello se les exigirá que guarden los datos del GPS de su teléfono para ayudar a rastrear los contactos.