Los All Blacks lo hicieron de nuevo. Derrotaron a los Wallabies en Sídney, por la primera fecha del Tres Naciones y se quedaron con la Bledisloe Cup una vez más. Con un total de 46 trofeos, esta fue la consagración número 18 de manera consecutiva para Nueva Zelanda, que viene reteniendo la Copa desde el 2003.
La Bledisloe Cup volvió a quedar en manos de Nueva Zelanda, un título que monopoliza y que viene quedando en sus manos. Esto luego de golear a los Wallabies por 43 a 5, siendo la mayor goleada de toda la historia en los duelos entre sí.
La imagen de Sam Cane levantando la Bledisloe Cup fue la foto perfecta para Nueva Zelanda y para el propio jugador. En su tercer partido liderando a los All Blacks, se dio el gusto de tomar con sus manos el prestigioso trofeo y festejar.
“El trofeo es muy importante para nosotros y nos importa mucho. Estoy tan orgulloso del trabajo que hemos realizado durante las últimas 5 o 6 semanas”, dijo el capitán de Nueva Zelanda. Estoy muy emocionado por saber a dónde puede llegar este equipo porque creo que hemos mejorado constantemente cada semana. Estamos construyendo algo aquí», dijo el capitán.
La goleada ante los Wallabies fue inobjetable y Cane dio su punto de vista sobre el rival. “Son un equipo duro. Habrá áreas con las que estarán contentos y habrá áreas que no lo son. Una cosa que siempre he admirado de los australianos es la forma en que se levantan. Volverán a aparecer la semana que viene con una confianza y una actitud similares”.
